Desde el corazón

La consciencia del momento presente

La consciencia del momento presente
se desarrolla fijando la atención en la respiración
el mantenimiento constante de esta conciencia, por un periodo de tiempo tan largo como sea posible es
Recta Concentración.
La concentración también es necesaria en las actividades cotidianas de la vida ordinaria, pero no es necesariamente la que llamamos Recta Concentración.
La concentración que, puede realmente liberarnos del sufrimiento, debe tener por núcleo un objeto que esté libre de todo deseo, de toda aversión y de toda ofuscación.
En cuanto empezamos a practicar la atención a la respiración vemos lo difícil que resulta sostenerla ininterrumpidamente.
A pesar de nuestra determinación de mantener la atención fija en el objeto, se nos escabulle de una forma o de otra, vemos cómo va de un pensamiento a otro, dando bandazos de un lado a otro como si estuviésemos embriagados.
De hecho, estamos embriagados con nuestra propia ignorancia e ilusiones, y no hacemos más que dar bandazos del pasado al futuro, del deseo a la eversión,
no podemos mantener una atención continua.
Pero, no debemos desalentarnos ni desanimarnos cuando se presenten estas dificultades, lo que tenemos que hacer es comprender que, cambiar los hábitos mentales que se han ido enraizando profundamente durante años lleva tiempo y que solo puede conseguirse trabajando con intensidad, continuidad, paciencia y perseverancia en una practica bien entendida
El esfuerzo, está en devolver la atención a la respiración tan pronto como te des cuenta de que se extravió, conseguir esto es ya un gran paso para corregir los vagabundeos de la mente.
la practica perseverante hará que la atención vuelva con más rapidez y que los periodos de olvido se acorten gradualmente, prolongándose los de atención sostenida.
Zopa